
En México utilizamos esa expresión para referirnos a aquellas cosas o situaciones que empiezan con mucha intensidad y vigor... y termina más rápido de lo que empezaron.
Un vez mas escribo de amores -o casiamores- pero esta vez lo hago desde otro punto de vista, no desde el "sufrido-corta venas" que me caracteriza. Esta vez, me siento en condiciones, contenta y estable conmigo, como si hubiera subido un escalón y pudiera ver desde ahí los sucesos ultimamente vividos.
Llamarada de petate... como siempre, así, lo bueno es que esta vez estoy de hierro, convencida y bien argumentada... ahora sí no quedo en mí chaparrito y la verdad... ya no me interesa.
Tengo un aura nueva y super brillante, azul y con chispitas, que me ayudan a poner las cosas en su justa medida, lo que no es para ti ... ni aunque te pongas, lo mismo lo que te toca, es inevitable, ineludible e impredecible. Pero ahora está bien, ya no hay dolor, ni lagrimitas, ni canciones tristes, ni búsqueda de explicaciones, ni 3 pies al gato, ahora se siente rico estar en mi piel, cuidarme sin tener que ser hostil y cerrar las puertas, jugar para mi propio equipo, y poder aceptar con gusto los goles y los empates.
"El que calla, otorga"
Otra vez gracias, porque ahora sí gane y no puedes hacer nada para remediarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario